InuYasha Wiki
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La Marca (目印, Mejirushi) es el septuagésimo segundo capítulo del manga InuYasha y el cuarto capítulo del Volumen 8.

Argumento[]

Inuyasha decidido a no dejar escapar a Naraku, atraviesa su Miasma a pesar de las advertencias de Miroku sobre el poder del veneno, mientras Miroku, Kaede, Shippo y Kagome observan de un lugar seguro. Naraku asegura que no es posible escapar de su miasma una vez adentro, pero Inuyasha desenvaina a Colmillo de Acero y corta la nube de veneno de Naraku, persiguiéndolo para poder atacarlo. Naraku se desvanece en su veneno y el corte de Inuyasha logra destruir la ropa d Naraku, Inuyasha puede observar la espalda de su enemigo por un instante, viendo una cicatriz con forma de araña. Naraku escapa utilizando su veneno diciendo que si sólo hubiese terminado su transformación y maldiciendo a Inuyasha. Los amigos de Inuyasha se acercan rápidamente a él confirmando que estaba vivo y sin daños importantes de la batalla, pero Inuyasha seguía concentrado en la marca de la espalda de Naraku. Inuyasha habla sobre la marca y Kaede dice que el bandido Onigumo tenía quemaduras graves por todo su cuerpo, lo que podría explicarse por que Naraku tiene restos de Onigumo. Inuyasha entonces piensa que la marca como una araña en la espalda es la identificación de Naraku. El grpuo vuelve al sector de la batalla anterior viendo a Royakan con la Semilla de Arroz en la cabeza, quien se libera del árbol de su boca y dice que su cabeza le duele. Kagome descubre el fragmento en la frente de Royakan quien se altera porque siente que está muriendo, Kagome se acerca e Inuyasha la detiene por el peligro. Kagome le pide permiso a Royakan para quitarle el fragmento quien asegura que es inútil, Kagome lo remueve fácilmente para la sorpresa de Kaede y Miroku. Royakan revela su verdadera personalidad amable y alegre pidiendo disculpas por lo sucedido y despidiéndose. Inuyasha alterado intenta detenerlo para interrogarlo, pero Miroku calma a Inuyasha diciendo que probablemente sólo haya sido controlado por Naraku, así que Inuyasha lo deja ir, aún enojado por las peleas innecesarias.

Inuyasha piensa en un árbol que encontrará a Naraku y vengará a Kikyo, siendo todo lo que puede hacer por ahora. Shippo dice que a penas llegó Kagome, Inuyasha se aisló. Kagome piensa que Inuyasha está herido por lo que pasó con Kikyo y que pudo haber sido mejor no regresar. Kagome se acerca al pozo completamente destruido por Inuyasha e intenta volver a su época explicando que tiene que volver por lo menos una vez más para contarle a sus cercanos lo sucedido. Inuyasha se acerca a Kagome y le pregunta con expresión de tristeza si volverá, explicándole que prefería que se quedara en su época para protegerla del peligro, pero cuando volvía su fuerza aumentaba y que no podía olvidar a Kikyo, pero quería que Kagome permaneciera a su lado.

En una aldea unos monjes conversaban sobre una sensación de maldad en el ambiente. Un monje junto a su joven Discípulo de Seikai pregunta a los aldeanos si no ha habido algún acontecimiento extraño en el lugar últimamente, los aldeanos responden que nada ocurre en un lugar pacífico como su aldea, especialmente desde que una Sacerdotisa llegó al área. El monje pregunta qué sacerdotisa. Por otro lado un grupo de niñas preguntaba a la sacerdotisa Kikyo si las plantas medicinales que recogían eran indicadas. El monje se impacta al conocer la identidad de la sacerdotisa, asegurando que es un ser que no corresponde a este mundo.

Apariciones[]

Personajes[]

Objetos[]

Lugares[]

  • Pozo Devora Huesos
  • Cueva de Onigumo (recuerdo)
  • Aldea de Sayo (Primera aparición)

Correspondencia con el Anime[]

Este capítulo corresponde totalmente a la parte final del episodio 21 y la parte inicial del episodio 22. Teniendo como escena no adaptada el reencuentro con Royakan y la conversación de Kagome con Inuyasha frente al pozo.

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