Reliquia Sagrada (神器, Jingi) es el nonagésimo sexto capítulo del manga InuYasha y el octavo capítulo del Volumen 10.
Argumento[]
El grupo de Inuyasha viaja a través del Lago de Suijin junto a Taromaru, mientras la neblina se hace más densa, Taromaru ve el pórtico de entrada al Templo de Suijin. Kagome se sorprende de que haya un templo tan grande en medio de un lago, Miroku afirma que el sacrificio ya está dentro y Taromaru sugiere apresurarse para salvar a su amigo antes de que la Deidad del Agua note el cambio. En la entrada del templo vigilaban unos guardias, Taromaru le dice al grupo que se oculten, pero Inuyasha salta de frente hacia ellos y los golpea, noqueándolos de inmediato, Taromaru se sorprende, pero Shippo y Kagome se alegran de lo fuerte que es Inuyasha.
El niño sacrificio es llevado a los aposentos de la Deidad del Agua por los sirvientes del templo. La deidad le ordena al muchacho que se acerque y descubre que sus manos están dañadas y llenas de tierra, por lo que asume que no es el verdadero hijo del patriarca, lo que significa que la aldea intenta engañar a un dios. El niño suplica a la deidad que lo perdone y lo coma a él en lugar del hijo del patriarca, pero la deidad estira el brazo aplastando la cabeza del niño y quebrando su máscara mientras expresa su frustración y deshonor. La deidad del agua le asegura al niño que será enviado de vuelta a la aldea junto con un temporal. Inuyasha y el resto del grupo irrumpen derrotando a los sirvientes y guardias, quienes tras ser golpeados se convierten en pequeñas criaturas marinas como cangrejos, carpas y truchas. Miroku dice que no hay que matar a los guardias y sirvientes, ya que sólo son criaturas del lago. Inuyasha encara a la deidad del agua. El niño en manos de la deidad del agua llama a Taromaru, quien le responde asustado a Suekichi, la deidad del agua al ver a Taromaru lo reconoce como el hijo del patriarca. Taromaru le propone a la deidad del agua dejar ir a Suekichi a cambio de su propia vida, pero Inuyasha le pregunta para qué los contrató. Inuyasha pregunta a la deidad del agua si es en realidad un Yokai y declara que va a desenmascararlo, pero la deidad del agua estira su brazo y toma un tridente con el que se protege de Colmillo de Acero y aleja a Inuyasha, regresando a su espada a la forma oxidada. Inuyasha no sabe por qué la transformación se deshizo, entonces la deidad del agua explica que su arma no es un simple tridente de demonio, sino que es la Alabarda de Amakoi, un arma sagrada. Inuyasha se dirige a atacar a la deidad del agua, pero Miroku lo detiene y explica que la situación es mala, ya que el tridente parece ser un arma realmente un arma sagrada, Kagome pregunta si ya que posee un arma sagrada puede que sea la deidad real y no un Yokai, mientras la deidad amenaza a Suekichi, Inuyasha reclama que luego de haber llegado ahí no es momento para rendirse, pero Sango explica que es estúpido, ya que pelear contra una deidad es mucho peor que contra un Yokai, ya que será maldecido de por vida si lo hace enfadar, así que atacar temerariamente es peligroso. La deidad asegura que ya es demasiado tarde.
Apariciones[]
Personajes[]
- Kagome
- Sango
- Inuyasha
- Shippo
- Kirara
- Miroku
- Taromaru
- Guardias del Templo de Suijin (primera aparición)
- Sirvientes del Templo de Suijin (primera aparición)
- Deidad del Agua (Impostor) (primera aparición)
- Suekichi
Objetos[]
- Barco
- Alabarda de Amakoi (primera aparición)
- Colmillo de Acero
Lugares[]
- Lago de Suijin (primera aparición)
- Aldea de Suijin
- Templo de Suijin (primera aparición)
Correspondencia con el Anime[]
Este capítulo corresponde completamente parte intermedia episodio 27.