Onigumo (鬼蜘蛛) es un personaje secundario del manga y anime InuYasha. Es un humano que posee una gran maldad y ambición. Su apariencia es muy similar a la de Muso, la extensión de Naraku, lo que se explica porque Muso fue un intento de Naraku para librarse de Onigumo.
Historia[]
Era un bandido sumamente ambicioso y traicionero que iba de aldea en aldea saqueando a todos con una banda de ladrones. Tendió una trampa a su camarada de saqueos Rasetsu para robarle sus hombres y riquezas, pero su plan no rindió frutos y Rasetsu se vengó de el, sus hombres lo quemaron, envolvieron el cuerpo en una alfombra y lo tiraron por un barranco, por esta razón se quebró sus dos piernas. Kikyo lo encontró y decidió cuidarlo y curarlo. Sufrió quemaduras horribles y estaba paralizado. Onigumo deseaba mucho a Kikyo y ofreció su cuerpo a centenares de demonios para tener un nuevo y restaurado cuerpo. Naraku nació de esta fusión y es por eso que este tiene una cicatriz en forma de araña en su espalda.
Posteriormente tanto en el anime como en el manga vuelve a aparecer en los recuerdos de Muso, pero son reabsorbidos por Naraku. Más Tarde Onigumo, o al menos su corazón humano, es depositado en el Monte Hakurei y sellado allí junto con los sentimientos de humano de Naraku.
Cerca del final de la serie. Naraku vuelve al monte a absorber sus sentimientos humanos para inundar la perla de maldad y traición.
Aparición[]
Aparece en el episodio 020 del Anime recordado por Kaede, ella dijo que luego de que Kikyo sellara a Inuyasha y posteriormente muriera fue a la caverna donde se encontraba Onigumo pero al llegar vio como todo se consumía por las llamas. Al ver esto ella pensó que no se salvaría y que sus restos serían calcinados por completo. En el manga la aparición de Onigumo es en el capítulo 065.